Los cursos en video son actualmente una de las estrategias más difundidas en la capacitación online. La síntesis y la diversidad de recursos que ofrece el video dan lugar a distintos tipos de producción, desde sencillas entrevistas a expertos hasta producciones especialmente preparadas para empresas y universidades.
No hay un solo tipo de cursos en video. En el desfile de formatos podemos encontrar a los videos de captura de pantalla o screencasts, típicos de la enseñanza de software, a las presentaciones de PowerPoint con la voz del presentador, a los videos explicativos animados y varios más. Dentro de todas las variantes posibles, hay una que desde nuestro punto de vista ofrece una muy buena relación costo-beneficio: la grabación y edición de un curso presencial.
Obviamente para grabar cursos en video hay que contar con la buena disposición del experto, que debe aceptar que grabemos su clase, su demostración o sus consejos. Si esta grabación se hace con ciertos cuidados y luego en la edición se arreglan algunas cosas, la decisión de grabar cursos en video ofrecerá las siguientes ventajas:
1. El capacitador reemplaza al texto
El experto está ahí y nos habla. Eso genera confianza porque lo vemos como una persona real y no un como texto. Conocemos sus matices, sus gestos, su búsqueda de ideas en vivo.
2. Todo puede editarse
En la edición se pueden cambiar muchas cosas. Se pueden recortar explicaciones y silencios, destacar conceptos, subtitular toda la clase, etc. La grabación pasa a ser un texto editable que además se puede combinar con otros recursos audiovisuales.
3. Se puede buscar por tema
El curso puede separarse en capítulos o segmentos de unos pocos minutos. Cada segmento puede verse como un título en un menú interactivo muy sencillo, una lista de videos al estilo Youtube. Así obtenemos un temario y al mismo tiempo una forma de encontrar y recorrer rápidamente los contenidos del curso.
4. Los cursos en video también son cursos web
Se pueden incorporar todos los recursos didácticos del eLearning, desde actividades SCORM hasta documentos para descargar. Si se aloja en una plataforma, se puede hacer que el curso reporte hasta qué segmento fue visto por cada usuario, aunque no se incluyan cuestionarios.
5. Pueden medirse los avances de los cursantes
Por supuesto, también se le pueden agregar cuestionarios o encuestas. Las preguntas pueden servir para la interacción de los alumnos o para comprobar si comprendieron algún concepto. Todo puede reportar a una plataforma, SCORM o del protocolo que sea.
6. La difusión a mínimo costo
Un capacitador puede ser grabado en el mejor auditorio, sucursal o sede y ser visto en toda la organización, a nivel regional o global. Puede hablar en un idioma pero estar subtitulado en varios otros.
Además, hay algo que es común a todos los formatos de capacitación online: los cursos en video son más cómodas de seguir que su versión presencial con horarios. No hay problemas de transporte ni de clima que afecten la asistencia a un curso grabado. Puede accederse desde cualquier dispositivo con conexión y en cualquier momento del día.

En nuestra plataforma Capacitar TV se pueden ver segmentos de video de los cursos online que hicimos para algunos clientes.
¿Querés leer nuestras recomendaciones para la grabación de cursos presenciales? Te contamos cómo grabar en video una capacitación presencial y cómo hacerlo con 2 cámaras.